Para nadie es un secreto que hoy en día, las redes sociales y el mundo del Internet como tal, han llegado a formar parte de nuestra vida de una manera que no sabríamos cómo estar sin ellas, ya que son de fácil acceso, rápidas y aplicables para cualquiera de nuestros gustos.
Existen muchas aplicaciones y redes que usamos a diario y con fines distintos, ya sea para mostrarnos como protagonistas de experiencias, enseñar cuáles son nuestras comidas favoritas, compartir en familia y nuestros amigos, etc. Pero, ¿Qué pasa cuando dejamos de ser los protagonistas de nuestras redes y pasan a serlo nuestros compañeros peludos? ¿Por qué no les creamos un perfil propio?
Muchos dudan en si deberían o no participar en una con su mascota. Lo cierto es que nuestra mascota se convierte en nuestra amiga y queremos compartir al mundo nuestro amor recíproco.
Otros
piensan que es una locura que nuestras mascotas tengan su cuenta en una red
social, pero este hecho es más común de lo que nos podemos imaginar. De acuerdo
con el diario británico The Telegraph, más de la mitad de las personas que
tienen una mascota en Gran Bretaña comparten fotos de las mismas a través de
distintas redes sociales, llegando incluso a crearles un espacio propio en
estas páginas con toda su información. Vídeos, imágenes, comentarios e incluso
cumpleaños y eventos en algunos casos.
También encontramos que según un estudio elaborado por la compañía de seguros de mascotas PetPlan demuestra que, una de cada diez mascotas tiene su propio perfil en Facebook, Twitter o Youtube. O como lo comenta el diario de México Excelsior “Las redes sociales levantan pasiones y la sociedad cada vez va más allá en este curioso mundo virtual donde cualquiera, animal o persona, puede abrir su propia cuenta on-line.” Para los amantes de los animales y dueños de mascotas no sólo están creando este tipo de perfiles con sus gatos, perros u otros miembros de cuatro patas, sino que también están utilizando las redes sociales para realizar acciones benéficas, teniendo grandes éxitos.
Por el mismo alcance e interacciones que estas redes llegan a manejar, ha permitido que sean una excelente herramienta para esos dueños desesperados que han perdido a sus mascotas; con simplemente dejar colgada su imagen y datos en estas páginas, tienen la oportunidad de que alguien, al otro lado de la pantalla, pueda difundir la noticia y lograr así aumentar una búsqueda que pueda traer al animal de nuevo a casa. Un ejemplo de estas cuentas en redes que tiene gran éxito y alcance es la de la Fundación Animales Sin Nombre, la cual cuenta con perfiles en varias redes sociales como Instagram, Twitter y Facebook.
La realidad es que los animales tienen cada vez más presencia en Internet y guste o no, las redes sociales se utilizan por y para ellos cada vez más.
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